La CNMC tenía un mes para aceptar la compra, pero lo han bastado 15 días
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CMNC) ha autorizado al fondo de inversión británico Zegona a comprar Vodafone España. Es la segunda autorización que recibe esta semana, dos días después de obtener la de la Comisión Europea. Esto la acerca a tomar el control de la operadora, algo que puede efectuarse antes de lo previsto, en el primer trimestre de 2024.
La toma del control puede llegar antes de lo esperado
El pasado 16 de enero Zegona pidió la autorización para comprar Vodafone a la CNMC. La organización disponía de un mes para aceptar o denegar la solicitud, pero ni siquiera ha necesitado agotar el plazo, ya que el 31 de enero la aprobó, según ha informado en un comunicado. La CNCM vigila que no se concentre el mercado español de las telecomunicaciones, algo que no sucederá con la adquisición, ya que ha indicado que las actividades de Zegona y Vodafone no se solapan en España, puesto que Zegona no está actualmente presente en el mercado español.
Las actividades de las partes no se solapan ni horizontal ni verticalmente en España, ya que Zegona no está actualmente presente en el mercado español. Por ello, la operación de concentración no modifica significativamente la estructura de los mercados afectados, produciéndose solamente un cambio en la titularidad del control de Vodafone en España.
Esta es una de las cuatro autorizaciones que debe recibir Zegona antes de tomar el control de Vodafone. Como indicamos al inicio, recientemente recibió la de la Comisión Europea, que vigila que los fondos públicos recibidos por Vodafone España desde la Unión Europea se traspasen correctamente al nuevo dueño. Solo le faltan la de la Junta de Inversiones Extranjera y la de la Secretaria de Estado de Telecomunicaciones, quienes examinan las inversiones extranjeras en sectores «estratégicos» a nivel nacional, como son las telecomunicaciones.
Dado las diversas autorizaciones que debía recibir Zegona, parecía que no iba a tomar el control hasta, aproximadamente, la mitad de año. Sin embargo, ya encadena dos en poco tiempo, por lo que quizás tome el control durante el primer trimestre. De este modo se podría poner oficialmente a los mandos de una operadora que poco a poco se debilita, para que lo ha empezado a potenciar su oferta, sobretodo la televisiva, incluyendo, entre otras novedades, la primera división española.
La compra se ha realizado por 5.000 millones de euros. Supone el 100% del traspaso de Vodafone España, que incluye tanto a la operadora, como a otras ramas, entre las que se encuentra la filial energética. De los 5.000 millones, 4.100 se pagarían en efectivo; mientras que 900 en acciones preferentes, cuyo reembolso se puede demorar hasta seis años tras la compra, en 2030.
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Autor: Pablo Hernando Illán